Maravilloso homenaje a Tristán Tzara (aunque se te ha olvidado a Hugo Ball) dió sustancia a la teoría dadaísta en el viejo café Voltaire,bautizado como "Cabaret Voltaire". Es estupendo. Refleja que Dadá fue solo el vehículo de los pobres corazones rotos de un mundo sin futuro. ¡Enhorabuena!
Como siempre, otra gozada de las tuyas.
ResponderEliminarY la anterior también.
Saludos sintéticos.
Impresionante. Sabes captar la atención al instante. Me encanta.
ResponderEliminarMaravilloso homenaje a Tristán Tzara (aunque se te ha olvidado a Hugo Ball) dió sustancia a la teoría dadaísta en el viejo café Voltaire,bautizado como "Cabaret Voltaire".
ResponderEliminarEs estupendo. Refleja que Dadá fue solo el vehículo de los pobres corazones rotos de un mundo sin futuro.
¡Enhorabuena!